martes, 2 de octubre de 2018

LOS TRASTEOS DE MI MADRE




De nuevo he retomado mis clases de inglés, esa asignatura pendiente que siempre está ahí, sin llegar a ningún puerto. Este año, una vez más, comienzo primero. No, si interés tengo, lo que no tengo es demasiada memoria para retener tantas palabras nuevas. Yo lo sigo intentando. ¿Quién sabe?
Como tengo el sueño tan descontrolado, pues decidí la noche antes de las clases tomarme media pastilla para dormir, no las suelo usar sino para cuando quiero madrugar, y así, levantarme después de haber dormido bien toda la noche. La clase me comienza a las diez y media, me daba tiempo de hacer algo antes de la clase. Bueno, esa noche me dormí como a las doce, y mi madre, se quedó viendo televisión en la salita, como hace siempre, aunque me acueste más tarde. No sé qué hora era, pero yo ya había cogido muy bien el sueño, y siento a mi madre llamándome. Pepi, Pepi, mira a ver si apagué bien la TV que hay una luz encendida. ¿? Pues me levanté sonada, como una campaña, y fui a ver la TV que estaba bien apagada, la luz encendida era del Reuter. Ella la apaga todas las noches, no sé que tenía esta en especial. Me vuelvo a la cama, me duermo de nuevo, y esta otra vez, sí miré el reloj, las 6:05h. Pepi, Pepi. ¿Qué pasa mamá? ¡Ven, ven mira, sácale fotos a la luna que mira qué bonita está! ¡Mira, mira, yo nunca he visto una luna así! ¡Sácale fotos, sácale fotos! Ya no era una campana sonada, ya mi cabeza repiqueteaba. ¡Ven, ven! me decía, llevándome hacia la ventana de la cocina, abierta de par en par. La luna estaba espectacular, cierto es, una luna llena preciosa, pero, que ¿hacía a esa hora espabilada como si fuera las cinco de la tarde? Si me había llamado a las dos o las tres de la madrugada. ¿No durmió en toda la noche?  Y yo con el efecto de la media pastilla, sacándole fotos a la luna. ¿Y qué voy a hacer? No sirve de nada explicarle las cosas, y si le digo algo, se contraría muchísimo, pues nada, a sacarle fotos a la luna a las 6:05 h. y de vuelta a la cama. El despertador me tenía que sonar a las 8:00h., y seguramente me sonó y lo apagué, lo cierto es que llegué con el tiempo justo a clase. Y ella, como siempre, durmiendo la mañana.
Ana Chaceta

EN SU LINEA

Hace más de dos meses que no escribo nada sobre mi madre, y no es precisamente porque no haya ocurrido cosas, que pasar han pasado, p...